Epicteto

Epicteto, nacido en Hierápolis hacia el año 50 d.C., fue un filósofo griego perteneciente a la escuela estoica. Pasó su vida como esclavo en Roma, al servicio de un funcionario de Nerón llamado Epafrodito. Murió hacia el año 138 d.C. en la ciudad de Nicópolis.

Epicteto se interesó por la filosofía a través de las enseñanzas de Musonio Rufo, un filósofo estoico. En el año 68 d.C., tras la muerte de Nerón, se libró de la esclavitud y comenzó a enseñar filosofía en Roma. Sin embargo, en el 88 d.C., el emperador Domiciano promulgó un decreto que ordenaba la expulsión de todos los filósofos de la ciudad. Tras este suceso, se trasladó a Nicópolis, donde estableció su propia escuela y alcanzó gran prestigio.

Al igual que Sócrates, Epicteto optó por no dejar constancia escrita. Sin embargo, sus lecciones fueron documentadas por uno de sus discípulos, el historiador Flavio Arriano. Como resultado, tenemos las compilaciones de las ideas de Epicteto: las Diatribas, o Discursos (compuestos por ocho libros), y el Manual (Encheiridion).

Epicteto

Filosofía

En su filosofía, Epicteto distinguía las cosas en dos clases:

  • Cosas que están bajo nuestro control (opiniones, impulsos, deseos);
  • Cosas que están fuera de nuestro control (reputación, cuerpo, posesiones, etc.);

Epicteto afirma que el bien y el mal sólo residen en las cosas que están bajo nuestro control, ya que éstas están sujetas a nuestra voluntad. Quienes eligen cosas que están fuera del alcance de la voluntad y, por tanto, fuera de nuestro control (los bienes materiales, el cuerpo, etc.) pueden encontrarse en un estado de servidumbre.

Por otro lado, quienes dirigen su atención a las cosas que están bajo su propio control alcanzan la verdadera libertad, porque son capaces de vivir la vida según sus deseos, logrando así la paz de espíritu. Proháiresis (pre-elección o pre-decisión) representa la decisión fundamental que coincide con la diferenciación entre lo que podemos controlar y lo que está fuera de nuestro alcance.

Aunque no rompió con el panteísmo materialista característico del estoicismo antiguo, Epicteto aborda la naturaleza divina de un modo más espiritual y religioso. En su concepción, Dios se revela como inteligencia, bondad y conocimiento, ejerciendo su providencia al ocuparse de cada ser humano. Actuar de acuerdo con el Logos equivale a obedecer a Dios, y seguir su voluntad equivale a alabarle y alcanzar la verdadera libertad.

Referencias

REALE, Giovanni; ANTISERI, Dário. História da Filosofia: Filosofia Pagã e Antiga. Vol. 1. São Paulo: Paulus, 2007.

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